Hace 140 años, hubo un hombre que revolucionó el fútbol mundial. Su nombre: Herbert Chapman. El adiestrador inglés innovó el fútbol asociado con el novedoso sistema táctico WM a fines de la década del 20.  Te contamos su historia a continuación.

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El fútbol mundial tiene varios entrenadores de renombre que impregnaron su huella hasta la eternidad. Uno de ellos es el inglés Herbert Chapman. El próximo 19 de enero se cumplirán 141 años del natalicio del hombre que revolucionó el deporte rey desde el punto de vista táctico.

Su nombre figura dentro de la lista de técnicos más innovadores y trascendentes en la evolución del fútbol. Dentro de ellas, también destacan nombres como Jimmy Hogan, Hugo Meisl, Gusztav Sebes, Rinus Michels, Johan Cruyff, Arrigo Sachi y Pep Guardiola.

La piramide invertida

En la década del 20, los equipos a la hora de pasar a fase ofensiva solían posicionarse con el viejo sistema 2-3-5, funcionamiento utilizado desde fines del siglo anterior y conocido también como la pirámide invertida.

En 1925 vendría el cambio de reglamento de la ley del offside y que postulaba a que el atacante debía tener dos rivales en vez de tres para ir al arco contrario y no estar adelantado.  Chapman tuvo la gran idea de alterar el esquema de 2-3-5 para mutarlo a un 3-2-2-3, dando vida a la famosa WM que marcó una revolución táctica en Inglaterra y luego en todo el mundo. 

Al mando del Arsenal, Herbert Chapman dominó el fútbol inglés con su nueva apuesta de futbolística y durante más de 20 años, su invento sería el sistema de juego por excelencia en gran parte de Europa.

El Arsenal de Herbert Chapman

La diferencia del británico con otros entrenadores contemporáneos como fueron Jimmy Hogan o el austríaco Hugo Meisl, es que él modificó la pizarra con la implementación de la nueva ley. En tanto, Hogan y Meisl mantuvieron el dibujo piramidal. No obstante, con el correr de los años, sus propuestas tendrían modificaciones tácticas basadas en las combinaciones a través del pase, influenciados por la escuela escocesa y el fútbol total de Rinus Michels en la Holanda de los 70.

La gran idea de Chapman consistía en el retroceso del antiguo volante central para marcar al centro delantero contrario. De esta manera, dejaba a dos volantes en el centro de la cancha y retrocedería a los dos delanteros interiores. Estos movimientos formarían el dibujo de las letras W y M, que le dieron el nombre al sistema creado por Sir Chapman.

¿Dónde está lo nuevo? Chapman no sólo apostó a defender mejor y con más hombres, sino que también motivó a sus dirigidos a atacar por la vía del contragolpe. Dos estrategias totalmente impensadas en aquellos años, por lo que lo convirtieron en un adelantado de la época.

La WM de Chapman gozaría de buena vida hasta que aparecería la Hungría de Gusztav Sebes en los años 50. En aquel equipo donde brillaría el fenomenal Ferenc Pukas le propinaría a la Inglaterra de Chapman una goleada por 6-3 en Wembley en 1953. Una derrota que sería letal para el orgullo táctico del inglés.

“Los mágicos magiares”, apodo que recibía la selección húngara, sentenciarían el fin de una era con un novedoso sistema 4-2-4. De esta forma, nacería una nueva propuesta marcada por un fútbol más ofensivo y que vería continuidad con la exitosa Brasil del 58 al 70 donde el mundo del fútbol conocería cuatro letras: Pelé. La supremacía de Brasil terminaría con la aparición de Rinus Michels y su naranja mecánica (Holanda) en aquel mundial de 1974.

Lo más valioso y destacable de Chapman es que su dibujo táctico perduró más de 20 años. Periodo que demuestra la gran influencia que tuvo el adiestrador tanto al fútbol inglés como el fútbol mundial. Fue el primer técnico que creyó que era necesario innovar en un sistema de juego, modificar la posición y función de sus jugadores.

Hoy ese legado yace en una estatua con las manos detrás que está emplazada en el Emirates Stadium del Arsenal, club donde armó la revolución futbolística para quedar en la historia del fútbol mundial.