Su nombre completo es Guillermo Alfonso Maripán Loayza. Sus más cercanos le dice “el Memo”. El espigado central formado en la UC se ganó un puesto en la zaga chilena a punta de esfuerzo y perseverancia como lo hizo en cadetes hasta llegar al primer equipo cruzado y luego partir a Europa. Un “chico” de 1,93 bien formado, 25 años, educado y con un tremendo potencial que ya está cosechando el  Alavés. Contra Uruguay fue un punto alto y contra Colombia se transformó en gran baluarte demostrando la madurez alcanzada en La Liga.

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 El “Toqui” mostró contra los cafeteros de qué está hecho y que tiene madera para transformarse en heredero de “Don Elías” como dueño y patrón de la defensa junto al “Pitbull” Medel. En un partido intenso y fuerte, Maripán estuvo impecable en su timing, cerrando justo, saliendo con buen toque y gran entrega. 

También mostró fiereza en los duelos individuales trancando firme como se debe hacer para evitar el peligro que acechaba en el  área. Su carácter y roce en Europa quedó de manifiesto en la imagen de televisión que mostró un “toque” de bienvenida al ingresado Duvan Zapata diciéndole “acá mando yo”.

Guillermo Maripán se ha ido soltando y adquiriendo la seguridad que hace falta para echarse al hombro la responsabilidad de ser central en la Roja. Nos alegramos por él, su familia y el quipo. Sin duda un acierto de Rueda al  haberle dado la confianza y lo más seguro que esta Copa America lo pondrá en vitrina de los equipos grandes Europa donde debe estar.

En la semis de la Copa América Brasil 2019 tendrá un gran desafío: aniquilar al killer Paolo Guerrero, quien ante Uruguay se vio anulado por la dupla de centrales José María Giménez y Diego Godín.