Su nombre es Felipe Maturana Infante. Tiene 25 años y es uno de los máximos exponentes del Crossfit Adaptado a nivel mundial. Hace poco más de un mes, participó en el campeonato mundial de la especialidad en Canadá alcanzado un cuarto lugar. Tuvo una sorprendente actuación en la Batalla de Los Andes en el Coliseo realizado el 9 de septiembre en el coliseo central del Estadio Nacional. Maturana pertenece al grueso de una gran cantidad de deportistas con capacidades diferentes y que merecen un trato inclusivo e igualitario como cualquier atleta. Revisa a continuación un nuevo Testimonio PD.
Camilo Zavala P.
Hace una semana, Chile entero vio en cadena nacional el lanzamiento de una nueva campaña de Teletón. La fundación que ayuda a personas con capacidades diferentes lanzó su campaña en cadena nacional con el gran hit de Rigeo sonando en cada estación televisiva.
Chile tiene a la actualidad alrededor de 2.836.818 personas discapacitadas, según un estudio realizado el 2015 por la corporación Ciudad Accesible. 1/3 de ellas, se dedican al deporte paralímpico. Hoy te presentamos la historia de una de ellas. Su nombre: Felipe Maturana.
Este joven atleta de 25 años y estudiante de fisioterapia en el Duoc UC, practica crossfit desde el 2015. Su pasión por los movimientos de potencia fue cada mes aumentando más. Dicha constancia, disciplina y esfuerzo en el box generó el interés de la marca Reebok para apoyarlo.
Hoy, es uno de los máximos exponentes nacionales del crossfit en la categoría adaptado a nivel mundial. En su última participación internacional, se ubicó en la cuarta posición en el WheelWOD Championship, el torneo más importante a nivel mundial de crossfit adaptado ante más de 200 competidores.
La experiencia en dicha competencia cambió su perspectivas en torno a las competencias: “Fue maravillosa. Uno se da cuenta que acá en Chile, el nivel que tenemos está en pañales”, revela.
PD: ¿En cuánto a Crossfit o en cuanto a deporte paralímpico?
“En cuanto a crossfit adaptado y cuanto a deporte en general. La organización allá era increíble. Te doy un ejemplo, si el programa decía que la primera prueba era a las 2, a las dos de la tarde estábamos compitiendo. Ni más ni menos. Otro nivel de competencia, competidores y organización”.
PD: ¿Cómo llegas a Reebok?
“Mi entrenador, Luis Casali, siempre ha trabajado con Reebok e incluso él trabaja para la marca Crossfit. Desde que él me agarró entrenando, me han tratado de ayudar con auspicios. Él me puso un pequeño contacto con Reebok y bueno la ropa está muy ligada a lo que es el crossfit. Quizás los valores que trato de inculcar al deporte me hicieron llegar a ellos”.
PD: ¿Cómo es tu día a día? ¿Cuántas veces entrenas? Cuéntanos un poco de eso.
“Bueno la alimentación es súper importante para nosotros los deportistas. Yo trato de comer todo natural y pocas cosas envasadas. Mi día a día; estudio fisioterapia en el Duoc en las mañanas, luego entreno en las tardes y después termino haciendo clases de Crossfit en el mismo lugar donde entreno. Se me hace súper fácil porque gano lucas haciendo lo que me gusta. Entreno, me ducho y luego estoy haciendo clases. La pega ideal (risas). Además, mi polola entrena conmigo, entonces el tiempo que paso entrenando y trabajando, también lo paso con ella”.
PD: A ti te falta una pierna, ¿Cómo lo haces para entrenar? ¿Hay un trabajo especial, le pones menos peso a un lado? ¿Cómo lo haces?
“En mi sistema de entrenamiento, trato de focalizar mi zona media. La zona media bien fuerte. Ya hablando de la sentadilla, los pesos son los mismos. Lo que cambia son los rangos de movimiento. En una sentadilla, se ocupa mucho pasar los 90 grados. A mí por un tema más de la prótesis, llego sólo a los 90 grados. Estoy en el límite de lo que se puede y lo que no se puede hacer en el crossfit convencional. En crossfit adaptado son los rangos lo que cambia”.
PD: Volviendo al tema de Canadá, ¿Cuáles son los cambios que más notaste en comparación con nuestro país?
“Me impresionó la organización y el respeto que existe por los competidores y por la gente que asiste a ver el evento. Me asombró el respeto por los horarios, como te decía antes. Nosotros estábamos media hora antes de empezar la prueba y la prueba partía puntual. Teníamos acceso a comida, a hidratación, acceso a baños, derecho a todo. Y en cuanto a competencia, también estuvo duro. Muy crossfit. Tuve que nadar, colgarme en una barra, correr una milla y luego hacer todo de vuelta. La primera prueba ya era tremenda. “Si así es la primera prueba, qué viene después”, pensaba”.
PD: Ya entrando a la realidad nacional, ¿Qué le gustaría al deportista adaptado esperar de la infraestructura chilena y del ente gubernamental propiamente tal?
“Es bien difícil. Una porque el Crossfit aún no es un deporte federado. Entonces el gobierno o el sistema, cuando tiene un deporte federado que tiene participaciones olímpicas, allí te ayudan. Pero al no estar federados tenemos que buscar otras instancias de apoyo. Reebok me ayudó mucho. Me pagó los pasajes. También tengo el apoyo de suplementos Winkler. Por ejemplo, u nos aminoácidos que te salen treinta lucas y que a mi me salen gratis, es fundamental para mi carrera. Hoy existe el apoyo de empresas privadas pero el apoyo gubernamental es nulo. Yo vivo en Puente Alto. La municipalidad, me ayuda constantemente, pero es por un tema mío que yo he ido a golpear las puertas. En los apoyos he tenido suerte”.
PD: ¿Cómo haz visto la evolución del Crossfit en Chile?
“A nivel competitivo estamos muy en pañales. En Canadá una sentadilla frontal con 120 kilos era normal y aquí es como lo máximo. Entonces, el nivel está en pañales y nosotros los competidores que buscan llegar más allá, competir contra tus propios límites, va a ayudar a subir el nivel”
PD: ¿Cuáles son tus metas más próximas?
“Mi meta más próxima es la Batalla de los Andes que será en el Estadio Nacional en septiembre. No está la categoría de crossfit adaptado pero sí habrá una exhibición. Vienen invitados de Brasil, México y algunos estadounidenses. Hay que aprovechar la instancia de mostrarle a los organizadores de campeonatos, a los box y al público en general chileno que el crossfit adaptado está y que damos la pelea”.
PD: En otras palabras, ser tratados como competidores normales
“Claro, lo que queremos demostrar es que podemos competir al mismo nivel. Así como hubo una categoría master, también queremos una categoría de adaptado. A los deportistas debemos fomentarlos y hay que salir a buscarlos. Cada box debería tener un representante de Crossfit adaptado y becarlo. Si logramos adquirir esta mentalidad, van a salir muchos campeones y tirar esta categoría hacia arriba”.
PD: Y de paso, fomentamos también la inclusión
“Claro, fomentamos la inclusión también en un país que está en un desarrollo mental que es muy distinto al canadiense. Con decirte que allá, nunca me sentí observado. Cosa que acá en Chile no me pasa. La prótesis aún es demasiado llamativa. Muchas veces, la gente me mira como preguntándose, ¿qué es eso? La gente todavía no lo asimila tanto”.
PD: ¿Te ha pasado que de repente estás dando clases de Crossfit y la gente te mira como un bicho raro porque estás con una prótesis?
“Quizás sí pero no sé si yo no me quiero dar cuenta o simplemente no pesco porque yo creo que todo recae en la actitud. Cuando doy la clase, soy yo el coach y yo mando. La gente si ve que yo lo puedo hacer, ellos también. Es gratificante cambiarle la mentalidad y visión la gente ese chip: “Tiene una pierna nomás, ¿qué me va a enseñar?” Ni te imaginas lo más allá qué te puedo enseñar más allá de lo deportivo. Todo esto es un juego donde yo te enseño y tú me enseñas”.