El próximo 25 de mayo comienza una nueva versión de los Juegos Odesur. La ciudad boliviana de Cochabamba será la anfitriona. Chile tendrá 448 competidores en las distintas disciplinas. Unas de las que quiere repetir el oro es el Salto Ecuestre por equipos. Tras la gran hazaña lograda en el Regimiento Ganaderos de Quillota, 4 binomios buscarán dejar a a nuestro país como potencia del cono sur.

Camilo Zavala P.

Hablar de deporte ecuestre es sinónimo de naturaleza y seres vivos. Caballos y jinetes conforman un binomio competitivo. Juntos emprenden el desafío de superar las vallas impuestas en cada recorrido en el menor tiempo posible.

En Santiago, una de las instalaciones deportivas más reconocidas para ejercer el deporte ecuestre es el Club de Polo San Cristóbal. El recinto ubicado en la comuna de Vitacura cuenta con más de 3000 metros cuadrados para practicar distintas modalidades como salto o adiestramiento.

Es en este recinto donde Panorama Deportivo conversó con los jinetes que buscarán revalidar el título conseguido hace cuatro años en Quillota. La sincronía y preparación del caballo es vital para lograr un desempeño.

Es por eso que Ignacio Montecinos, Alfonso Anguita, Cristóbal Boetto y Andrés Lausen ya se preparan para el mega evento que comienza el próximo 25 de mayo. “Tengo expectativas grandes. Espero sacar una medalla como lo hicimos en los Odesur pasados, que conseguimos medallas por equipo. Espero sacar una medalla individual porque en Santiago no pude saltar la final. Me quedé con las ganas”, expresa Ignacio Montecinos.

Ignacio Montecinos. (Foto: Camilo Zavala P.)

Este deporte tiene una gran particularidad: Caballo y jinete se unen para dar lo mejor de cada uno. Ambos forman un binomio que debe estar en conectada para sortear cada uno de los saltos que tenga el recorrido.

“La conexión entre el vínculo y el animal es muy fuerte. Es un vínculo que va madurando a través del tiempo. Empiezan a ver conexiones donde el caballo entiende lo que uno hace. Hay veces que hay que apretar lo justo o soltar un poquito. El caballo se va ambientando y esto ya empieza a ser lo que es un binomio como se le conoce. Que es la suma del caballo con el jinete”, describe Cristóbal Boetto, quien también será parte del Team Chile en Bolivia.

Cristóbal Boetto.

De repetir la gran hazaña de la cuna de las paltas, Chile quedaría posicionado como un gran exponente de salto en el cono sur.  Sin embargo, ¿Puede nuestro país ser una potencia a nivel mundial? “Yo creo que en chile sin lugar a dudas existen condiciones para que nos transformemos en una potencia ecuestre y siento que se está avanzando en esa dirección pero este es un proceso largo y lento. los esfuerzos y evoluciones ven resultados en el mediano y largo plazo”, argumenta Andrés Lausen.

“Es importante que todos los integrantes de la comunidad ecuestre trabajen para evolucionar y lograr que la equitación chilena sea cada vez más moderna, con cada vez mejor competencia interna, cada vez con más jinetes compitiendo por chile y logrando experiencias en el exterior, con cada vez más niños desarrollándose competitivamente en el deporte a temprana edad, con cada vez más y mejores caballos jóvenes que nos permitan abordar los desafíos de la competencia. Criadores, entrenadores, jurados, dirigentes, jinetes, etc; debemos ser cada vez más y mejores profesionales, mirar hacia los países que son más desarrollados que nosotros para aprender de sus errores y aciertos y poder desarrollarnos hacia el futuro que todos queremos para la equitación chilena”, agrega.

“Hablar de potencia es difícil. Sí creo que acá tenemos buenas condiciones para alcanzar un buen nivel. Tenemos buenos jinetes y la cría está mejorando mucho. Se están mejorando las pistas y la Federación está trabajando bastante en mejorar el nivel de los concursos. Solamente hay que invertir en buenos caballos y los resultados se irán dando con el tiempo”, complementa esta vez Ignacio Montecinos.

Existen más de 32 criaderos a lo largo del país. Algunos caballos pueden llegar a valer lo equivalente a un departamento de tres dormitorios. La materia prima está. Sólo falta trabajarla.