El tenista alemán de 21 años, Alexander Zverev es uno de los que dará que hablar este 2019. Tras adjudicarse el Torneo de Maestros ante el serbio Novak Djokovic, Sascha acapara todas las miradas del mundo deportivo. Algunos ya apuestan en que pocos años, el teutón se convertirá en el nuevo rey del tenis.

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El Principito cierra un 2018 tremendo. Con 21 años, Zverev ya ganó tres Masters 1000 (Canadá, Madrid y Roma). Hace una semana, alzó el trofeo de ATP World Tour Finals ante Novak Djokovic (SRB) y tuvo el privilegio de ganarle a nada menos que a Roger Federer en el round robin. Los expertos del tenis y sus mismos pares ya lo proyectan como una leyenda.

“Hay un montón de similitudes en términos de trayectoria de tenis profesional en nuestras carreras. Esperemos que incluso pueda superarme. Sinceramente se lo deseo. Es un jugador muy dedicado a su trabajo, y sin duda, es una persona muy agradable, alguien que se lleva muy bien con todo el mundo”, lo describía Nole minutos después de que su amigo levantara el trofeo que lo catalogaba como el maestro del 2018.

“Tenemos a la nueva superestrella. Decíamos que el tenis necesitaba nuevas caras, y el mejor de todos es Alexander Zverev”, complementaba Boris Becker, comentarista oficial de tenis en la BBC y tres campeón del Masters (1988, 1992 Y 1995).

“Sascha ya había vencido a Federer y Djokovic. Pero hacerlo en el mismo torneo y en uno de los más importantes, dice que vendrán muchas cosas grandes a continuación”, agregó el astro alemán.

Pese a todos estos elogios, el teutón de 1,98 metros de altura pide cautela: “Dios mío, he ganado uno, Djokovic ha ganado cinco masters.  Ha ganado como 148 títulos más que yo. No nos vayamos por ahí”, apuntó en Londres Zverev.

“Es increíble, estoy muy orgulloso de ser el campeón tras vencer en semifinales a Federer y Djokovic en la final. Es asombroso”, expresaba. Un logro no menor. Un doblete de esta categoría sólo lo han podido hacer Rafael Nadal, Andy Murray y el argentino David Nalbandian.

Con la obtención del Masters sumó su cuarto título en el 2018. El Masters 1000 de Madrid, el ATP de Munich y Washington son los otros tres trofeos que levantó este año. Para el 2019, Alexander Zverev deberá romper su maleficio en el primer Grand Slam del Año: el Abierto de Australia. Allí buscará pasar por primera vez a cuartos de final. Un llave que se podría justificar desde el punto de vista psicológico y la corta edad del teutón.

A pesar de todas estas aristas, Sascha es el principal candidato de la nueva generación de tenistas a ser el primero del mundo en el corto plazo y junto con ello, desbancar al Big Three (Nadal, Federer y Djokovic).

“Zverev me hace retrotraerme al torneo que gané en Lisboa (Copa Masters). Yo también tuve que ganar a los dos grandes (Sampras y Agassi). El derrotó a Federer y después se enfrentó contra Djokovic. No hay otra manera para desbancar a esta generación galáctica, cuyos integrantes viven más que todos. Están ahí 10 y 15 años y solo van a parar cuando otros les saquen”, expuso el ex tenista brasileño, Gustavo Kuerten a EFE.

Tradición tenística

¿Cómo Alexander Zverev puede ser tan ganador? Una de las respuestas, podría venir desde su familia. Su padre y mentor, Alexander, había sido jugador ATP durante los años 80. Zverev padre formó parte del equipo soviético de Copa Davis. Su madre, Irina, también fue jugadora y actualmente mantiene su trabajo de entrenadora.  Si a esto le sumamos que el principito obedece las ordenes de Ivan Lendl, quizás más conjeturas podemos sacar.

“Mi padre es el que me dio la base. Mi papá es el que me enseñó a jugar al tenis. Y le estoy muy agradecido por eso”, expresó a la misma agencia española Alexander Zverev.

Su padre es el precursor de su estilo de juego agresivo desde la línea de base, con un servicio fuerte (210 km /h) y un excelente revés a dos manos. Todo esos atributos han hecho que Zverev ya acumule 10 títulos en su carrera y sume U$ 14.907.928 dólares en premio.