El holandés, Max Verstappen, se adjudicó el Gran Premio de Austria. El piloto de Red Bull se coronó campeón por delante de los Ferrari de Kimi Raikkonen (2°) y Sebastián Vettel (3°). Pese a quedarse con el bronce, el alemán del Cavagllino Rampante retomó la punta en la clasificación general tras el abandono de Lewis Hamilton (Mercedes).
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El piloto tulipán se coronó campeón de su cuarto gran premio a sus cortos 20 años y de paso tapó bocas a todos los que lo criticaron en el inicio de la temporada. La victoria del piloto de Red Bull fue inesperada para todo el medio del deporte motor.
El holandés saltó a primer lugar tras el fracaso de los Mercedes. Valtteri Bottas abandonó y Lewis Hamilton falló en su estrategia en el periodo del VSC. De esta forma, Verstappen y sus neumáticos supieron aguantar el acecho de los Ferrari de Raikkonen y Vettel.
“Fue muy difícil conservar los neumáticos. Realmente teníamos que cuidarlos, había un montón de ampollas. Logramos aguantar hasta el final. Es increíble ganar aquí con Red Bull en el circuito de casa y con tantos seguidores holandeses”, apuntó el veinteañero tulipán.
“Tenía que ponerme al día con los puntos, así que hoy fue definitivamente un día muy bueno para mí y espero que podamos continuar así”, agregó. El joven piloto acumuló tres podios consecutivos y con este Gran Premio, logró su primera victoria en el 2018. Además, ya se encuentra a tres puntos de su compañero, Daniel Ricciardo.
Unbelievable! Thank you so much @redbullracing for the amazing car and strategy, and the Orange army for the incredible support 🙌🏻 This win will stay with me for the rest of my life #unleashthelion #keeppushing #AustrianGP pic.twitter.com/Y2Cub0Rfu3
— Max Verstappen (@Max33Verstappen) 1 de julio de 2018
Max Verstappen logró su mejor performance en el país de Red Bull, ya que supo conservar los neumáticos hasta el final a punta una demostración de conducción y con sólo 20 años. Cabe destacar que el piloto de la bebida energética encaró el tramo final con el neumático izquierdo trasero en un estado crítico por los blisters.
Para no romperlo, debía variar su conducción en cada curva. En aquellas chicanas más críticas donde el neumático sufría más, este veinteañero levantaba el pie de su acelerador sufriendo el ahogo de los Ferrari. Sin embargo, en las curvas menos riesgosas para el caucho, Vertappen no traicionó su agresividad y pisó a fondo el pedal derecho.
Sus ingenieros quedaron alucinados con este tipo de decisiones a la hora de conducir y competir. “Increíble. Mantuvo la rueda trasera izquierda más fría que la trasera derecha, y la trasera izquierda aquí es la que toma toda la carga en las curvas”, expuso Christian Horner, director del Redbull F1 Team.
Horner reveló que el holandés cambió su paso en las curvas rápidas. Logrando así manejar las ampollas de los neumáticos blandos que perjudicaron a su compañero de equipo Daniel Ricciardo, Lewis Hamilton y los Ferrari. Vertappen cambió el enfoque en las curvas rápidas priorizando el cuidado total del caucho.
“Constantemente estaba pidiendo información y controlando esos neumáticos y es por eso que no se llenaron de ampollas. Una conducción muy, muy madura para él”, agregó Christian Horner.
Vettel también sonrió
Otro de los pilotos que se trajo una sonrisa desde el Red Bull Ring fue Sebastián Vettel (Ferrari). El alemán remató tercero y de paso recuperó el liderato en el campeonato mundial de pilotos tras la pésima estrategia adquirida por los Mercedes de Vottas y Hamilton, quienes no lograron llegar a la meta pese a salir desde la primera línea.
Hamilton le hizo caso a su equipo y cometió un error estratégico no entrando en boxes mientras estaba el Coche Virtual de Seguridad (VSC). Dicha decisión determinó el abandono del cuádruple campeón mundial en la vuelta 64. El inglés no desertaba desde Malasia en 2016 y llevaba 33 carreras metiendo puntos.