Qatar 2022 se esfumó. Uruguay, Colombia y Perú lapidaron el sueño mundialista de la Generación Dorada y nuevamente, los simpatizantes de La Roja tendrán que ver el mundial por TV. La eliminación aún cuesta digerirla, no obstante el periodismo deportivo ya comienza a sacar algunas conclusiones en en frío. Recambio, consejo de presidentes, identidad futbolística, separación de aguas; son algunas de las tesis que te analizaremos a continuación.

PD Chile

Durante todo el proceso eliminatorio, el plantel de la selección nacional masculina de fútbol comandado por Arturo Vidal, Alexis Sánchez, Claudio Bravo y Charles Aránguiz; estuvo marcado por incongruencias futbolísticas de hueso calibre.

Se cambió la verticalidad por el pragmatismo de Rueda y Lasarte, perdiendo la verdadera identidad futbolística hizo que Chile levantara dos Copas Américas y compitiese en dos campeonatos mundiales.

¿A qué se debería esta pérdida de identidad futbolística? Sigue leyendo las tesis que te proponemos a continuación

Quizás una de las tesis que más se discuten es el casi nulo funcionamiento colectivo pregonado tanto en la era Rueda como en la era Lasarte. En ambos procesos, el Equipo de Todos migró desde la verticalidad por la cual era llamativa en todo el planeta hacia un pragmatismo que incluso en algunos partidos le pasó la cuenta.

De nada sirvió acentuar el juego de La Roja en la posesión y tenencia del balón si finalmente los partidos se ganan con goles. Este análisis también es sostenido por ex miembros del cuadro nacional.

“Ver a la selección en este último tiempo es no saber a qué jugamos. No entendimos la forma y el sistema y en esto Chile quedó en deuda y eso fue lo peor que nos pudo pasar”, comentó en diálogo con Radio Cooperativa en la antesala al choque con los orientales, el ahora defensa de Coquimbo Unido, Gonzalo Jara.

Jarita resaltó al medio radial el verdadero rol que debían cumplir elementos tan importantes como son Arturo Vidal o Alexis Sánchez. “Alexis y Arturo son jugadores que no pueden tener una posición fija, pero lo que tiene que sostener eso es el trabajo en defensa y mediocampo, para que no nos pillen de contra”, esgrimió a la señal 93.3 FM.

La tesis expuesta por Jara es tajante

Otro punto que se le podría sumar a este análisis es que este proceso estuvo marcado por la baja plenitud futbolístico del colectivo. Las lesiones, la baja continuidad y rendimiento futbolístico  de algunas piezas de Chile marcaron la pauta en encuentros importantes en donde se enredaron puntos determinantes. Nos referimos a los encuentros con Colombia, Bolivia, Ecuador y Perú. Todos rivales directos en la batalla por clasificar.

¿Qué viene o qué debe pasar? Es difícil sacar conjeturas cuando aún el ente que comanda el fútbol chileno no da indicios de un plan a mediano plazo sin establecer un nuevo directorio. No obstante, algunas aristas que se deben pensar para volver a ser competitivos son sin lugar a dudas una nueva identidad futbolística la cual debe estar a acorde a la próxima camada de jugadores y a la experiencia que puedan transmitir los puntales de la Generación Dorada que aún seguirán vigente o activos para el próximo proceso eliminatorio.

Es un secreto a voces que ningún dirigente quiere asumir. A tal punto, que parece chiste o una broma de mal gusto. Durante la era Rueda, el Consejo de Presidentes alteró el proceso eliminatorio poniendo trabas dirigenciales en la programación de partidos, nominaciones de jugadores, etc.

El Consejo de Presidentes es una organismo que debe desaparecer o bien abstraerse de todas las operaciones y procesos de seleccione nacionales. Es una mala apuesta y un mal augurio que tanto las sociedades anónimas junto con los representantes de jugadores que influyen en las decisiones de dichos clubes tengan injerencia indirecta en La Roja.

Esta pseuda corrupción invisible debe parar ya. Los señores feudales están matando el fútbol chileno con sus triquiñuelas. Aquellos chanchullos se envidencian en el mal rendimiento de los equipos nacionales en torneos internacionales, el bajísimo nivel del torneo nacional y la poca promoción de las series menores quienes ante una serie de estatutos o normativas de competición, como el cupo de extranjero, ven truncada su posibilidad de seguir ascendiendo una carrera deportiva con 17 o 19 años.

“Hay que parar pronto esto porque se están robando todo”, dijo hace un par de años el ex presidente de Ohiggins de Rancagua, Ricardo Abumohor a la salida de un Consejo de Presidentes. Uno de los emblemas de la familia del fútbol quizás fue pitoniso en su sentencia. En la actualidad, todos los clubes ligados a la ANFP reciben los activos del ex CDF, los cuales no se ven indicios de reinversión en infraestructura, series menores, etc.

Este mal indicio también se atañe a la marca selección, la cual le pertenece a la Federación de Fútbol de Chile, ente que pertenece a la ANFP, en otras palabras, los clubes. La nueva batalla que vendrá pensando en volver al éxito internacional a nivel país es que los dirigentes del fútbol chileno dejen de lado sus intereses y logren un consenso para que la federación logre desprenderse del organismo que regula las competencias a nivel de club.

La contienda será desigual ya que la ANFP/ Federación de Fútbol de Chile percibe por la marca selección cerca de 27.8 millones de dólares. Una cifra que les llega a los clubes y que no estarán dispuestos a soltar. Esta lucha política tendrá su siguiente temporada en diciembre, cuando haya elecciones en la ANFP y el nuevo mandamás electo establezca sus próximas directrices.

Por último, es clave recalcar que aquí también se requiere voluntad política estatal. En el Parlamento, duerme entre cajones el proyecto de ley que regula la formación de sociedades anónimas deportIvas y el cual busca impedir que representantes controlen a los clubes o bien los compren.

Este proyecto duerme en el congreso gracias al intenso lobby hecho por los señores feudales de nuestro balompié nacional. No es descabellado pensar una posible intervención por parte de la FIFA para poder darle luz verde a este proyecto de ley.

Tras la eliminación del mundial,  la labor de Francis Cagigao ha sido puesta en tela de juicio. Incluso desde avenida Quilin apuntan que la relación del español con Pablo Milad estaría cortada. Más allá de ésta otra rencilla política, el recambio de Chile ya comenzó y debe seguir.

Al término del partido con Uruguay, Pablo Milad responsabilizó al fracaso a las series menores. Algo totalmente insólito ya que hasta antes de la Pandemia, fue el mismo Milad quien suspendió el torneo de fútbol joven, mandando a gran parte del staff al seguro de cesantía.

Una solución pronta sería reformular la segunda división profesional o bien plantear un torneo de reserva que se juegue antes de los partidos de primera. Haciendo un simil al rugby chileno, quienes con un torneo de intermedia que se juega en paralelo al torneo de honor, logran darle rodaje a todo el plantel y entre ellos a jugadores jóvenes.

Es importante señalar que Francis Cagigao tiene contrato hasta fin de año. Ni Pablo Milad se ha acercado a conversar su renovación, por lo que es una clara señal de que no hay comandante asignado para este buque.

¿Es posible esto en el fútbol? Todo estará a la visión estratégica y deportiva de quienes decidan las directrices del balompié en el Consejo de presidentes.

En lo que respecta al fútbol, nombres Brayan Cortés, Paulo Díaz, Guillermo Maripán, Benjamín Kuscevic, Enzo Roco, Francisco Sierralta, Sebastián Vegas, Erick Pulgar, Claudio Baeza, Diego Valdés, Pablo Galdames, Ben Brereton, y Joaquín Montecinos, son los llamados a liderar el nuevo recambio. A estos jugadores quizás se podrían sumar a lista nombres como Cristóbal Campos, Bruno Gutiérrez, Carlos Palacios, Tomás Alarcón, Víctor Méndez, entre otros.

Mientras más nombres seleccionables, mejor será. A esta lista, también habrá que estar atentos a la forma futbolística y física que lleguen los de la Generación Dorada quienes ya expresaron que están dispuestos a liderar este nuevo proceso.

Quizás una buena solución pensando en la materia prima es que más allá de los nombres; es importante trabajar seriamente con las Sub 15 y Sub 16. Así a futuro se podrá trabajar con un equipo de proyección.

Hace un tiempo se hizo un torneo de reserva que lo ganó Colo Colo. No obstante, el Consejo de Presidentes rechazó este certamen, complicando entonces la aparición de nuevas figuras y truncando gravemente la detección de talento. 

Es elemental que la Federación de Fútbol de Chile recupere su injerencia en la CONMEBOL. Quizás la designación de Pablo Milad como vicepresidente del ente subcontinental es un pequeño indicio, el cual tampoco tiene relevancia ya que la confederación asigna un cargo por representante de cada federación en su plana mayor.

No obstante, se necesita total muñequeo político para afrontar temas problemáticos como las designaciones de árbitros o bien los cambios de localías. Este muñequeo también debe estar potenciado por un alto conocimiento de las estructuras de fútbol. En otras palabras, ser empático futbolísticamente. 

Por ejemplo, Eber Aquino dirigió dos veces a Chile, siendo mal evaluado. Acaso con un poco de lobby, la historia hubiese sido distinta.

Recuperar el sitial de Conmebol repercutirá en un mejor trato hacia los clubes chilenos que participen en torneos internacionales y también un respeto dirigencia a la infraestructura nacional.

Por último, dejar en claro que la Generación Dorada no fracasó. Ellos marcaron una historia, nos dieron alegrías, levantaron 2 copas Américas y sin duda alguna marcaron un precedente en toda una nación y ciudadanía.

Una ciudadanía que buscaba en el fútbol una salida a toda la polarización política e incertidumbre y que ahora también necesita de cambios o nuevos vientos.